Fructificación polimorfa (cilíndrica o en forma de maza, erecta pero irregular, como dedos deformes de una mano), de 4-8 alto y 1-3 grueso. Superficie externa negruzca, redondeada en el ápice, áspera al tacto, con cavidades y rugosidad originada por los peritecios donde se forma el himenio. El pie es una mera prolongación del cuerpo fructífero, estrechado en la base, también negro. Carne blanca, de consistencia acorchada, con una peculiaridad: al corte longitudinal, puede apreciarse una disposición más o menos rayada, en forma de espiga. Esporada pardo-oscuro, esporas en forma de plátano o huso.

X. LONGIPES, más esbelta, menos robusta, pie más definido y alargado, superficie arrugada, esporas más pequeñas, fructifica en madera de arce o aliso.

Saprofita o parasita madera de haya, roble y otros latifolios.

Verano – Otoño. Casi siempre, fasciculada o en grupos.

Carne dura, sin valor en cocina.

Foto: Alan Bergo. foragerchef.com